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Jueves 28 de marzo de 2024
Sobre un art�culo period�stico fuera de serie

Actualizado: 2018-05-04
Sobre un art�culo period�stico fuera de serie

Aquiles C�rdova Mor�n

El d�a s�bado de la semana anterior, cay� en mis manos un art�culo notable. Se titula �Sobre Andr�s Manuel L�pez Obrador y Antorcha� y apareci� el 28 de abril de 2018 en una p�gina Web llamada �Medium�. Su autor es Julio Huato, uno de tantos cerebros mexicanos que emigran hacia los Estados Unidos en busca de oportunidades laborales, si mis breves pesquisas no me enga�an. El art�culo se destaca, como digo, por la seriedad de sus argumentos, por el equilibrio y honradez intelectual de sus planteamientos y por su visible esfuerzo de romper la dura piel de lo trivial, de lo superficial, y alcanzar el fondo de las cuestiones que aborda. Dif�cilmente se encontrar� algo parecido en la prensa nacional. En raz�n de lo dicho, quiero dar a conocer las reflexiones que su lectura me ha provocado.
1).- De entrada quiero asegurarle a don Julio Huato que coincido con el 90 o el 95% de las opiniones plasmadas en su art�culo, porcentaje que incluye tanto lo que favorece como lo que censura a ambas formaciones pol�ticas.
2).- Es algo del dominio p�blico, algo sobre lo que hemos trabajado tenazmente por difundir a trav�s de todos los medios a nuestro alcance, que el Movimiento Antorchista Nacional no est� de acuerdo con la situaci�n social y econ�mica de las grandes masas populares de nuestro pa�s; que no estamos de acuerdo con la desigualdad y la pobreza crecientes de dichas masas y, consecuentemente, que tampoco estamos de acuerdo con el modelo econ�mico que se aplica en el pa�s, el llamado �neoliberalismo� o �econom�a de libre mercado� que, a juicio nuestro y de muchos calificados especialistas de M�xico y del mundo, es el responsable directo de esta situaci�n.
3).- En esta s�lida base se apoya el trabajo del Movimiento Antorchista Nacional que, durante sus 44 a�osde existencia, se ha dedicado a paliar los efectos m�s brutales de la desigualdad y la pobreza de los m�s humildes, peleando junto a ellos, hombro con hombro y palmo a palmo, por educaci�n, vivienda, salud, empleo, servicios urbanos, transporte, etc. Eso en el corto plazo. En el largo, su lucha es por derrocar el modelo neoliberal y sustituirlo por uno que tome en cuenta de modo fundamental las necesidades b�sicas de las mayor�as, tanto en el plano econ�mico, material, como en el pol�tico y espiritual. Un modelo que reconozca sin reservas su pleno derecho a una vida humana y digna por ser las productoras directas (no �nicas) de la riqueza social. Y en preparaci�n para esta batalla a largo plazo, empleamos las luchas cortoplacistas como un medio para organizar y educar a los marginados, que son quienes habr�n de librarla en el futuro.
4).- As� las cosas, no hay raz�n de fondo, como sugiere Julio Huato, para que MORENA y los antorchistas no se unan en un frente �nico de combate a la pobreza, a la injusticia social y a los privilegios excesivos de una peque�a �lite. Y a�ado que menos hay raz�n para negar la lucha cotidiana de los antorchistas en defensa de los menos favorecidos, para distorsionarla o hacerla a un lado de plano, con tal de ganar imagen medi�tica o por intereses electorales no siempre leg�timos. No hay raz�n ni derecho para acusarlos de �grupo paramilitar�, �brazo armado del PRI�, �grupo de choque al servicio del PRI�, �asesinos�, �corruptos�, �chantajistas� y otras lindezas semejantes. Y sin embargo, eso es lo que han hecho y hacen los morenistas, los mismos que se declaran sorprendidos y decepcionados al vernos navegar con bandera priista, en vez de mirarnos humillados y de rodillas tocando las puertas de MORENA, de cuyos medios y voceros ha salido y sale el caudal mayor de insultos como los que he enlistado parcialmente.
5).- Sobre este fondo se aprecia mejor la honradez y la madurez pol�tica de Julio Huato cuando llama a no permitir que nos atrape el pasado. Por ello aclaro que no se trata solo de agravios pasados ni solo de amargas palabras, sino de agresiones muy presentes y actuantes al d�a de hoy, a las que hay que sumar las amenazas, veladas y abiertas, en el discurso de MORENA, en caso de ganar la Presidencia de la Rep�blica. Debo a�adir, adem�s, que tal como lo aconseja Huato, nosotros nos hemos abstenido siempre, antes y ahora, de atacar a nadie, sea quien sea, solo por no coincidir con nuestro modo de pensar o de obrar; nos hemos limitado a defendernos cuando se nos ataca sin raz�n. Y a quien diga lo contrario, lo desafiamos a que presente pruebas al canto. Por parte de MORENA, en cambio, bastar� una ojeada r�pida a medios como La Jornada, Proceso y otros, para formar una colecci�n de agravios, calumnias e imputaciones sin prueba, que satisfar�a con creces al odio m�s exigente. Podr�a poner, incluso, ejemplos de buena voluntad por nuestra parte, como �negociaciones� a niveles muy altos que nunca se cumplieron y se pagaron con nuevos ataques, en el pasado; y hechos de sangre contra antorchistas en el presente, para apuntalar lo dicho, pero no creo que haga falta.
6).- A pesar de todo, siento que no es suficiente respuesta al llamado de Julio Huato: el destino de M�xico y los mexicanos humildes bien vale la pena hacer a un lado agravios en aras de la unidad de los luchadores sociales. Por eso, creo necesario reconocer, con la honradez que merece el art�culo de Julio Huato, que nuestras discrepancias con MORENA van m�s all� de los insultos.
a).- Como ya dije, Antorcha culpa al modelo econ�mico neoliberal de la p�sima situaci�n nacional, es decir, su cr�tica va dirigida a la estructura o cimentaci�n del edificio social. L�pez Obrador, en cambio, culpa de todo a la corrupci�n del r�gimen. Ahora bien, para nosotros, la corrupci�n tiene tambi�n su ra�z en el modelo, nace de all� y de all� se nutre, se alimenta y se fortalece todos los d�as, de donde se deduce que no es posible erradicarla sin erradicar el modelo que la alimenta. Adem�s, seg�n nosotros, la corrupci�n es mucho m�s que las rater�as y el peculado de los pol�ticos; en realidad alcanza a todas las fuerzas dominantes del sistema. La corrupci�n es la madre nutricia de la mayor�a de las grandes fortunas, nacionales y extranjeras, amasadas con el sudor de los mexicanos. Pero el candidato de MORENA piensa que la corrupci�n es una cuesti�n de moral personal, fruto de la descomposici�n moral de los pol�ticos y solo de �stos; transforma as� el problema en un problema de �tica y deja intocada la corrupci�n de los grandes capitales. Por eso puede asegurar que su combate es tambi�n moral: el ejemplo del presidente. Su cr�tica es puramente superestructural y eso, a nuestro juicio, es un garrafal y peligroso error de enfoque.
b).- Es verdad que L�pez Obrador ha dicho tambi�n que, si llega al poder, dar� de baja a los corruptos en el gobierno y los sustituir� con gente honesta. Eso se llama, en buena l�gica, destruir el viejo aparato de gobierno para construir uno nuevo. Pero una cosa as� solo se la puede permitir una revoluci�n armada triunfante (recordemos que eso fue lo que no se atrevi� a hacer la Comuna de Par�s) y no sin graves peligros. �C�mo y con qui�n enfrentar� L�pez Obrador la reacci�n de los viejos poderes defenestrados? Y �de d�nde sacar� los miles y miles de �honestos� con que reconstruir� el aparato del poder? Otro peligroso error de enfoque.
c).- No quiero meterme a hacer cuentas sobre si los ahorros que obtendr� del combate a la corrupci�n le alcanzar�n para cumplir sus promesas. Ya otros lo hicieron. Pero s� debo decir que promesas como echar abajo la reforma energ�tica, la reforma educativa y el nuevo aeropuerto, tampoco me parecen maduras y bien sustentadas. Recuperar el petr�leo y ponerlo en manos honestas para beneficio del pueblo suena bien, pero esconde la �enchilada completa�, es decir, calla que no es solo el petr�leo lo que hemos entregado al extranjero, sino tambi�n los bancos, la miner�a, el comercio al mayoreo y menudeo, los hoteles y todo lo ligado al turismo, las playas, las l�neas a�reas, etc., etc. Por tanto, la pregunta es leg�tima: �por qu� el petr�leo s� y todo lo dem�s no? �Vale la pena correr el riesgo de un conflicto internacional por el rescate del petr�leo en un pa�s colonizado como el nuestro? �Y qui�n garantizar� que los nuevos administradores no se corromper�n como los del pasado? La educaci�n est� mal, necesita una cirug�a mayor que no garantiza la reforma actual. Pero �s� la garantizan la CNTE y su poder sindical? Y lo que se ahorre cancelando el aeropuerto, �alcanzar� para sacar de la pobreza a los mexicanos?
d).- Finalmente, es evidente que las filas lopezobradoristas, con muy insuficientes excepciones, est�n repletas de resentidos, oportunistas, trapecistas pol�ticos e incluso de intelectuales y caciques reaccionarios y opuestos a su proyecto de pa�s. Por tanto, como dice Julio Huato, L�pez Obrador est� ante una disyuntiva peligrosa: si no cumple sus promesas, provocar� la decepci�n y el rechazo de sus seguidores que virar�n hacia la derecha ultramontana; si las cumple, desencadenar� la violencia opositora de poderosas fuerzas del sistema actual. Y no se ve con qu� sus huestes est�n preparadas para resistir el embate que ser� feroz. Nosotros, por nuestra parte, no hemos atacado ni atacaremos sin motivo al candidato de MORENA, a pesar de no estar de acuerdo con �l en cuestiones esenciales; y con nuestra propia historia como respaldo, podemos asegurar que nunca seremos enemigos, ni siquiera obst�culo involuntario, de un gobierno que, de buena fe, trabaje a favor de los que menos tienen. Nos abstenemos de alardear de esta verdad porque no queremos dar la impresi�n de cobard�a u oportunismo ante el probable vencedor de la contienda electoral, como hace la mayor�a de aquellos quienes �hasta el nombre del honor ignoran�, como dijo el poeta.
En s�ntesis: Antorcha no est� con el candidato de MORENA no solo por el trato infamante que le ha dispensado y le dispensa su gente, que pudiera pasarse por alto; sino tambi�n porque su cr�tica al r�gimen es parcial, equivocada en cierta medida y provocadora de una reacci�n nacional e internacional que no podr� enfrentar, como no pudieron Dilma Rousseff en Brasil, Cristina Fern�ndez en Argentina y Correa en Ecuador. Antorcha busca un cambio para M�xico pero no cosm�tico ni aventurero. Est� consciente de que ese cambio solo lo puede llevar a cabo un pueblo organizado, politizado y decidido a todo por conquistar una vida mejor, y lleva 44 a�os trabajando en ello y para ello. Pero sabe que el �xito depende tambi�n, y mucho, de la correlaci�n mundial de fuerzas entre el imperialismo guerrerista, voraz y enemigo de la paz mundial, y los pa�ses que piden un mundo multipolar, solidario, pac�fico y con progreso compartido para todos los hombres y todos los pueblos.
Hay que prepararse bien para la lucha interna seria, que es la �nica que puede triunfar (no es causal que en Am�rica Latina solo Cuba y Venezuela est�n en pie de lucha; solo ellos est�n apoyados por un pueblo organizado y consciente), y hay que estar atentos a la evoluci�n de la correlaci�n mundial. La conjunci�n de ambos factores ser� la se�al segura para un cambio exitoso. Y mientras tanto, �qu�? Mientras tanto, don Julio, hay que hacer caso al sabio consejo de Cristo �Dejad que los muertos entierren a sus muertos�. As� se explica sin contradicciones la posici�n electoral de Antorcha en esta coyuntura.


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