Pacho Viejo, Coatepec.- (AVC/Flavia Morales) En Veracruz bastaba ser sospechoso para ser detenido, interrogado, golpeado y finalmente desaparecido durante el gobierno de Javier Duarte, así lo demuestra la carpeta de investigación FEADPD/ZCX/011/2017 que integró la Fiscalía General del Estado.
La estructura de desaparición forzada en Veracruz quedó registrada a través de tarjetas informativas donde los policías estatales y ex mandos policiacos daban constancia y se informaban de las detenciones, interrogatorios y entrega de detenidos.
Durante la audiencia de imputación que se sigue a la causa penal 22/2018, donde se acusa a tres ex mandos policiacos y 16 policías por desaparición forzada de 15 personas en 2013, se reveló que el entonces Secretario de Seguridad Pública Arturo Bermúdez Zurita, creó cuerpos de élite que servían para detener civiles, presuntamente sospechosos de ser criminales.
En la cadena de mando están involucrados el ex director de la Fuerza Civil, Roberto González Meza, el ex director de Prevención y Reinserción social, el ex Director Operativo, el ex subsecretario José Nabor Nava y otros mandos.
Los detenidos y desaparecidos son 12 hombres y dos mujeres, todos entre 17 y 23 años, los cuales eran intervenidos en diversos puntos de Xalapa, como sospechosos ser halcones, o estar vinculados al grupo criminal de lo zetas.
Bajo ese pretexto, el grupo de la Fuerza de Reacción de la División de la SSP detenía a los civiles, los interrogaban, torturaban y después los entregaban en la Academia de Policía o un puente en las Trancas en la central de abastos, a elementos del grupo Fuerza Especial de la Secretaría de Seguridad Pública,
Las detenciones nunca se registraron oficialmente ni fueron notificadas a la autoridad correspondiente.
Durante la lectura de la carpeta de investigación que consta de 35 tomos integrada por la Fiscalía Especializada en Desaparecidos se otorgaron 89 datos de pruebas, en los que se incluye el testimonio de ocho testigos de identidad reservada, 15 denuncias, tarjetas informativas firmadas por altos mandos y policías estatales, así como más de 50 oficios de diversos funcionarios.
Cabe recordar que el pasado 6 de febrero se giró una orden de aprehensión en contra de 31 mandos policías y policías, de los cuales la FGE logró la aprehensión de 16 policías en activo, el ex director de la fuerza civil, Roberto González Meza, además del Secretario de Seguridad Pública, Arturo Bermúdez Zurita, y el ex director de prevención y reinserción social, Oscar Sánchez Tirado.
En la audiencia inicial durante el proceso imputación y medidas cautelares, el fiscal especializado en desapariciones, Eduardo Coronel Gamboa, reveló que en Veracruz existían dos políticas de seguridad pública, una oficial y publica , y otra ilegal y clandestina de miembros dedicados a actividades de detenciones ilegales.
Se detalló que en la Secretaría de Seguridad Pública existía una organización vertical cuya cúspide era Arturo Bermúdez Zurita, donde implementó un patrón sistemático de desaparición forzada donde participaron diversas áreas con roles asignados, así lograron la desaparición de al menos 15 personas.
El modus operandis era detener ilegalmente a civiles sospechosos, interrogarlos, y cuando “confesaban” que estaban vinculados con grupos delictivos, eran entregados a otro grupo: Fuerza Especial de la Secretaría de Seguridad Pública, quien se encargaba de las desapariciones.
Así se lograron confirmar la detención y desaparición en 2013 de Héctor de Jesús Hoyos Barradas, Mario Alberto Rivera, Alberto Hernández Acosta, José de Jesús Martínez, Jorge Leal Amaro, Liberio Ruíz Castañeda, Uriel Hernández Vega, Vivian Hernández Moguel, Antonio Morales Marín, Héctor Campos, Cecilia de la Cruz Luján, Carlos Ruiz Barbadillo, José Cruz Peralta y Andrés Aguilar Marín.
