Desde el Café
¿Se cierra el círculo contra Cuitláhuac?
Bernardo Gutiérrez Parra
Hasta la fecha nadie se explica qué le dio a Cuitláhuac García por rehabilitar el estadio Luis “Pirata” Fuente cuando Veracruz no tiene equipo de futbol ni en tercera división, y sobre todo cuando existen otras urgentes prioridades. Pero el sujeto despilfarró casi 2 mil millones de pesos en una obra que para colmo no quedó.
Este lunes, Cristina Pérez Silva, secretaria general del PAN, dijo en conferencia de prensa que su partido lamenta el derroche de recursos en el Pirata que costó a los veracruzanos más de 1,676 millones de pesos, una cifra que indigna y ofende.
Agregó que a pesar del escandaloso gasto, la obra presenta graves deficiencias estructurales y de diseño: asientos con visibilidad limitada, escaleras peligrosas, ventilación inadecuada, zonas oscuras y materiales de baja calidad. Y todo ello ha sido documentado en medios de comunicación, redes sociales y por los asistentes al estadio en su reapertura.
Y es verdad lector, hasta la gobernadora Rocío Nahle se dio cuenta porque también este lunes, reconoció “una falla de diseño” en el estadio que su gobierno va a remediar. Y qué bueno, pero ¿cuánto costarán los remiendos?
Rocío Nahle heredó una obra hecha con las patas, pero es quien está pagando los platos rotos porque es a ella y no a su antecesor, a la que están criticando por darle prioridad al inmueble por encima de otras prioridades. Pero según me comentaron, el deseo de la gobernadora no es despilfarrar, sino garantizar la funcionalidad del estadio y evitar que suceda una desgracia que su gobierno tenga que cargar.
Cristina Pérez dijo que ojalá se devuelva el dinero que se despilfarró en el Pirata. Pero eso jamás sucederá, esos más de 1, 600 millones de pesos que se desviaron del presupuesto de la SEV y que serían para la educación de los niños y jóvenes veracruzanos ya volaron, ya se fueron, ya se esfumaron, ya se perdieron.
¿Habrá castigo para el principal responsable?
Elementos para llevar ante un juez a Cuitláhuac García sobran. La fraudulenta compra o arrendamiento de 160 patrullas, el multimillonario desvío de recursos en la Secretaría de Salud (debidamente documentado por Marlon Ramírez Marín), los faltantes en la cuenta pública del 2023 y el mega despilfarro con el Pirata, son apenas unos ejemplos.
Gente cercana a Rocío Nahle me ha hecho ver que mientras Cuitláhuac le lanza de vez en cuando uno que otro misil vía Zenyazen Escobar, la gobernadora sigue armando a conciencia los expedientes contra su antecesor al que quiere ver en prisión.
“La jefa no lleva prisa, espera el momento oportuno para actuar y ese momento no tarda en llegar. Más temprano que tarde el círculo contra Cuitláhuac se tendrá que cerrar”.
¿Será?
Por el bien de Veracruz, ojalá.
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