Orizaba, Ver.- (AVC) La reciente muerte de un león juvenil en la Unidad de Manejo Ambiental (UMA) Citlaltépetl provocó este domingo la movilización de más de medio centenar de ciudadanos y activistas en la llamada “Marcha por la Dignidad Animal”. La protesta comenzó a las 9:30 de la mañana en el Parque Castillo y avanzó por calles principales de Orizaba hasta el Paseo del Río, donde se localizan las instalaciones que albergan felinos y otras especies. Con pancartas y consignas, los participantes señalaron que el deceso del león de dos años y tres meses no es un caso aislado, sino parte de una serie de muertes y desapariciones ocurridas desde la creación de la UMA en 2010. Historial de muertes y denuncias Los manifestantes recordaron que este mismo año murió el canguro “Skippy”, presuntamente envenenado, y denunciaron agresiones a pecaríes y un oso que aún permanece en el sitio. También mencionaron desapariciones de fauna y la falta de claridad sobre el número actual de ejemplares. Según sus datos, hasta 2023 había cerca de 900 animales de 35 especies, atendidos únicamente por 15 trabajadores municipales, número considerado insuficiente para garantizar cuidados constantes. Durante el pronunciamiento, los activistas plantearon varias exigencias: reubicar a los animales en espacios adecuados, mejorar las condiciones de resguardo en el Paseo del Río, terminar con el uso de fauna como atractivo turístico, transparentar los reportes de muertes y desapariciones, y aplicar la Ley Estatal 876 de Protección Animal. El Ayuntamiento atribuyó la muerte del león a una “enfermedad avanzada”, pero los participantes sostienen que la atención médica pudo haber evitado el desenlace. Para los colectivos, este hecho confirma sus denuncias sobre deficiencias en alimentación, atención veterinaria y planes de conservación. Un mensaje colectivo “Los animales no son un espectáculo ni una herramienta política. Son seres vivos con derecho a una vida libre de sufrimiento”, expresaron los organizadores. La movilización en Orizaba concluyó con el compromiso de mantener la presión social hasta lograr cambios en la gestión de la UMA Citlaltépetl.
|