Xalapa, Ver.– (AVC) El estadio General Heriberto Jara Corona cumplió 100 años en medio de deterioro, suciedad y encharcamientos por falta de mantenimiento. A pesar de que en mayo se anunció una remodelación, los trabajos siguen inconclusos.
El inmueble presenta pasillos sucios, gradas con daños y áreas encharcadas tras las lluvias. Los visitantes señalan que la ausencia de conservación ha deteriorado su funcionalidad y su imagen como recinto deportivo y cultural.
En mayo se dio a conocer el plan de remodelación, con la promesa de iniciar el 30 de junio labores de resane, impermeabilización, reparación de escalones y butacas, además de pintura general. Sin embargo, solo se observa material de raspado, mientras que las butacas retiradas permanecen apiladas.
Este 20 de septiembre se realizó un acto conmemorativo por los 100 años que se realizó frente al busto de Heriberto Jara, con la participación de familiares, arquitectos, ingenieros, historiadores y público en general, quienes resaltaron el valor histórico y social del estadio inaugurado en 1925.
Jorge Rolland Constantine, nieto del ingeniero Modesto C. Rolland, recordó que desde hace una década impulsaron celebraciones anuales rumbo al centenario. “Tenemos que honrar a quienes crearon esta magna obra”, dijo, al destacar la visión del gobernador Jara y la labor técnica de su abuelo.
El arquitecto Abraham Broca Castillo subrayó la relevancia técnica del techo volado de más de 3,100 metros cuadrados, una estructura de acero y concreto que aún destaca por su estabilidad y diseño geométrico.
El ingeniero Rafael Fentanes Hernández coincidió en la necesidad de un diagnóstico técnico profundo. Señaló que en la media luna del palco de honor se forma un charco que no drena, lo que revela la presencia de agua subterránea y la urgencia de un mantenimiento más integral que los trabajos superficiales anunciados.
Se destacó también que el estadio ha sido escenario de competencias deportivas, actos culturales, artísticos y políticos, lo que lo convierte en parte del imaginario colectivo de los xalapeños.
“El Estadio Xalapeño es una obra pública que nos da cohesión social. Tenemos la responsabilidad de preservarlo para las futuras generaciones”, se expresó durante el homenaje.