CLAROSCUROS

13 millones 400 mil mexicanos dejaron de ser pobres con AMLO: FOX, el más cercano, con más de seis millones…

PARTE II

José Luis Ortega Vidal

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Entre los principios básicos del modelo económico neoliberal (Milton Friedman, Premio Nobel de Economía 1976, uno de sus principales impulsores), se plantea una menor intervención del Estado (Gobierno) en la economía, la disminución de impuestos, privatizar todo lo privatizable incluyendo la educación y la salud.

La visión neoliberal de Milton Friedman influyó en los gobiernos de Ronald Reagan, en Estados Unidos; y la dictadura de Augusto Pinochet, en Chile.

En México, esta teoría se aplicó a partir del sexenio de Miguel de la Madrid Hurtado, 1982-1988, con Carlos Salinas de Gortari como uno de los tecnócratas más destacados del antepenúltimo sexenio en manos del PRI.

Miguel de la Madrid recibió una economía hecha pedazos luego del sexenio de José López Portillo y su nacionalización bancaria, su devaluación del peso, entre otras decisiones, circunstancias y coyunturas ligadas a su vez al sexenio populista de Luis Echeverría Álvarez.

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Convertido en presidente de México, Carlos Salinas de Gortari aplicó con poder sus ideas y condujo el modelo neoliberal -versión mexicana- a la privatización de la mayor parte de empresas del gobierno federal, creadas a lo largo de décadas durante el siglo XX y en las etapas posteriores a la revolución de 1910.

Con Salinas de Gortari se privatizaron Teléfonos de México, Altos Hornos de México, BANAMEX, BANCOMER, SOMEX, SERFIN, COMERMEX, Mexicana de Aviación, MexCobre y Minera Cananea, entre otras.

En el sur de Veracruz, se privatizó LICONSA, en Acayucan; además de cerrar las azufreras APSA en Jáltipan de Morelos y CEDI en Texistepec.

Miles de empleados fueron lanzados a la calle y las consecuencias de aquel golpe laboral aún se sienten en una zona sumergida en el desempleo y la violencia.

También, durante el sexenio salinista surgió el programa SOLIDARIDAD, abocado a la disminución de la pobreza mediante la entrega de recursos a la población vulnerable, sólo que -a diferencia de BIENESTAR- aquel dinero pasó por las manos del aparato burocrático.

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PEMEX y CFE se salvaron de ser vendidos pero durante el gobierno de Ernesto Zedillo Ponce de León, el último presidente priista antes de la debacle del partido tricolor, se privatizaron los Ferrocarriles Nacionales.

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El PRI perdió el poder durante los comicios del año 2000 y a partir de ese momento el Partido Acción Nacional quedó al frente del país durante dos sexenios.

También apegados al modelo neoliberal, Vicente Fox Quezada y Felipe Calderón Hinojosa apostaron por la apertura de la economía al sector privado.

El último presidente neoliberal fue Enrique Peña Nieto, representante de la llamada nueva generación priista conformada por jóvenes políticos que –en teoría- debían evitar y corregir los errores tricolores del pasado; entre ellos la corrupción.

No lo hicieron y durante los comicios del 2018 Andrés Manuel López Obrador los borró del poder, hasta la fecha.

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Luego de treinta y seis años de política económica neoliberal, se empezó a poner en práctica un modelo económico mixto, el de la llamada 4T o Cuarta Transformación, consistente en una participación mayor del Estado en la economía sin rechazo de la inversión privada, aunque a ésta se le pusieron frenos en ramos clave como el petrolero y eléctrico, de infraestructura, salud, entre otros.

Con AMLO el gobierno emprendió la búsqueda de la Soberanía Energética a través del rescate oficial de PEMEX y la CFE; modificó unilateralmente la política de sueldos a la clase trabajadora, convirtió en mandato constitucional la entrega de dinero público a sectores sociales desprotegidos vía BIENESTAR.

Asimismo, se invirtió dinero público en mega obras: Tren Maya; AIFA; Refinería Olmeca en Dos Bocas; ampliación de puertos en Coatzacoalcos y Salina Cruz como parte del Corredor Interoceánico del Istmo de Tehuantepec.

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Ahora bien, el breve asomo a seis gobiernos neoliberales –cuatro del PRI y dos del PAN- y uno de la 4T, viene a colación por el logro histórico de 13.4 millones de mexicanos que han sido retirados de la condición de pobreza durante el periodo 2018-2024; de acuerdo al INEGI.

Este logro se inscribe en una política de gobierno contraria al modelo neoliberal; concepto convertido en sinónimo de Satanás, o virus político causante de todas las desgracias de México, desde el discurso de AMLO durante las últimas tres décadas, por lo menos…

Ser neoliberal, simpatizar con las ideas neoliberales, estar a favor de algunos postulados neoliberales, en el México actual representa algo así como un pecado mortal desde la perspectiva de la izquierda política en vigor; pero esto es tema aparte.

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El pasado 14 de agosto, La Jornada publicó:

“Luego de que con Carlos Salinas de Gortari la pobreza alcanzó a 52.4 por ciento de la población, la crisis desatada en el cambio de administración abonó a que en el sexenio de Ernesto Zedillo Ponce de León (1994-2000) aumentará a 53.6 por ciento, 1.2 puntos más.

Al concluir la administración de Vicente Fox Quesada (2000-2006), la pobreza llegó a 42.9 por ciento, una reducción de 10.7 puntos porcentuales. Una merma de tal dimensión no se había registrado en los años recientes, pero fue revertida en parte cuando Felipe Calderón Hinojosa ocupó la Presidencia del país.

Si bien en ese sexenio –como en el de Zedillo y el de Andrés Manuel López Obrador– se registraron crisis mundiales, en ningún otro cedió tanto la pobreza. El periodo de Calderón Hinojosa, que primero se publicitó como “el presidente del empleo”, concluyó con 45.5 por ciento de la población mexicana con alguna carencia social, un avance de 2.6 puntos porcentuales respecto a lo que dejó su predecesor.

Incluso durante la presidencia de Enrique Peña Nieto se registró una reducción de 3.6 puntos porcentuales respecto de lo que dejó Calderón Hinojosa, para terminar en 41.9 por ciento. Y, de acuerdo con los más recientes datos del Inegi, la administración de López Obrador –en la cual se universalizaron programas sociales y se promovió la recuperación del salario mínimo– concluyó con la disminución más importante de la pobreza de los últimos sexenios, de 12.3 puntos porcentuales.”

La Jornada - Registra México la mayor reducción de pobreza en últimos cinco sexenios

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Aquí hay un dato importante: un gobierno neoliberal, el de Vicente Fox, redujo la pobreza en México en 10.7 puntos porcentuales.

Información publicada por La Jornada en su edición del 30 de noviembre del 2006, indica que durante el sexenio de Vicente Fox, nuestro país sumaba 47.2 millones de pobres al año 2004.

Luego, de 2004 al 2006, se incrementó el número de pobres con 270 mil 491.

Fox Quezada recibió el gobierno con 53.6 millones de pobres durante el año 2000.

El panista guanajuatense es quien presenta los mejores números en disminución de la pobreza, que superó los 6 millones de mexicanos fuera de esa condición.

Con todo, la cifra de 13.4 millones alcanzada durante el sexenio de Andrés Manuel López Obrador lo rebasa por más del doble, de acuerdo a estos datos.