| Lo que el turismo cuenta de nosotras |
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Actualizado: 2018-07-31 |
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LO QUE EL TURISMO CUENTA DE NOSOTRAS
Mujeres que saben lat�n
Por: Harmida Rubio Guti�rrez
Hace tiempo que cuando viajo, pongo atenci�n en las historias que se cuentan en los tours, caminatas, atractivos tur�sticos, museos y dem�s recorridos que se hacen cuando estoy conociendo alg�n lugar; me fijo particularmente en lo que se narra de las mujeres. Como es de esperarse, las historias en su mayor�a no son gratas.
Basta con recordar las leyendas de los t�picos recorridos diurnos o nocturnos, que explican el origen de los nombres de los callejones, las casonas antiguas, o de alguna plaza. Gran parte de estas leyendas son tr�gicas, y est�n relacionadas con historias de violencia contra las mujeres. El nombre de �El callej�n del diamante de Xalapa�, tiene su origen en una historia de celos, que acaba en el asesinato de una mujer. En Puebla existe la leyenda de �La casa del que mat� al animal�, que es una casa donde viv�a un virrey viudo con dos hijos; y un d�a un animal monstruoso se comi� a uno de ellos; el virrey en venganza ofreci� de recompensa la mano de su hija a quien matara a ese animal. Obviamente apareci� un hombre que mat� al animal y se cas� con la hija del virrey, a quien nadie le pregunt� si quer�a o no casarse.
Hay algunas otras mucho m�s monstruosas, como las leyendas de los conventos, que tienen que ver con el maltrato y los abusos sexuales que las monjas experimentaban en ellos.
En Cuba, hay un recorrido tur�stico por casas patrimoniales, en las que antes viv�a gente de mucho dinero y que ten�a esclavas; a las cuales castigaban y torturaban por quedar embarazadas; en su mayor�a despu�s de actos de abuso por parte de sus propios patrones.
Creo que todas y todos hemos escuchado historias de este tipo cuando viajamos; pero lo curioso, y m�s bien alarmante; es que casi nadie se escandaliza, nadie dice nada cuando el gu�a recita en tono mon�tono estos relatos de terror que vivieron en el pasado muchas mujeres. Se tiene tan interiorizada la violencia contra las mujeres, la discriminaci�n y el abuso, que forman ya parte de los recorridos tur�sticos, como los cuadros, los azulejos, los relojes y otros objetos. La historia mis�gina se cuenta y el recorrido sigue, como si nada, como si eso no importara.
Son muy pocos los lugares y los itinerarios tur�sticos que integran otro tipo de historias de las mujeres, pero afortunadamente ya existen algunos. �La Ruta de las Mujeres de la Barcelona Rebelde� es un recorrido a pie por la ciudad de Barcelona, en el cual se da a conocer los logros de las mujeres (como el derecho al voto, al aborto o el divorcio) a trav�s de siete d�cadas; y la participaci�n de ellas en la Guerra Civil y los principales movimientos sociales, levantamientos y procesos revolucionarios de esa ciudad.
En Buenos Aires, surgi� un ejercicio ciudadano, que no es precisamente tur�stico, pero que s� es una narraci�n itinerante de las luchas y conquistas de las mujeres en esa ciudad; se llama �Cartograf�as feministas�, y son recorridos guiados por historiadoras e investigadoras feministas que se han dedicado a desentra�ar estos relatos y dar a conocer otros universos, m�s trascendentales y ejemplares para las mujeres en Argentina.
Ojal� que la industria tur�stica empiece a cambiar sus contenidos al respecto, y ver esta situaci�n con mirada cr�tica. Pero tambi�n quienes hacemos turismo podemos cambiar parte de este fen�meno; podemos comentar nuestra opini�n en el mismo recorrido que se mencionan estas historias, y hacer ver que la violencia contra las mujeres no es normal y no debe ser parte del atractivo tur�stico. Tambi�n podemos buscar otro tipo de narraciones que involucren a las mujeres con un enfoque m�s relevante y digno; para construirnos discursos que nos ayuden a salir de la gran ola de violencia que vivimos, para mostrar lo que las mujeres del pasado han hecho por nosotras; y para recordarlas cada vez que pasemos por alg�n lugar.
La historia de los lugares no es �nica e inamovible, es cambiante, y puede dar nuevas y buenas noticias; es cuesti�n de buscarlas y sacarlas a la luz.
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